Centros adscritos y desmantelamiento de lo público. Capítulo I

Comunicado del SAT - Universidad de Sevilla

plan_boloniaEn la Universidad de Sevilla existen actualmente seis centros adscritos, es decir, centros que no son propios de nuestra universidad pero que imparten titulaciones oficiales de la misma. De ellos cuatro son de titularidad privada: San Juan de Dios, Cruz Roja, Cardenal Espínola y EUSA. Mientras que el centro “Francisco Maldonado” de Osuna es propiedad de una fundación pública y el centro de enfermería del Hospital Virgen del Rocío es fruto de la colaboración entre la US y el Servicio Andaluz de Salud. En algún caso la existencia de estas escuelas tiene razones históricas. Por ejemplo, la escuela de enfermería de la Cruz Roja existe en Sevilla desde 1946, adscribiéndose a la Universidad en 1977. Sin embargo, en el actual contexto de recortes y desmantelamiento de lo público, nos tememos que las razones actuales del crecimiento de estos centros sean otras.

En cualquier caso, desde el PDI del SAT-US reclamamos la integración progresiva de estos centros como propios de la Universidad de Sevilla. Si la sociedad le demanda a la Universidad una mayor oferta de plazas de estudios universitarios, ésta debe ofertarlas con sus propios medios. Este año la US ha ofertado 75 plazas menos de nuevo ingreso en estudios de grado. Si separamos entre centros propios y adscritos, se ofertan 346 plazas menos en los centros propios mientras que se aumenta en 271 la oferta de plazas para los centros adscritos. Es decir, con la excusa de la crisis y de los recortes, el retroceso de lo público es aprovechado, inmediatamente, por empresas privadas.

El coste de estos estudios en los centros adscritos es, en general, mucho más caro que el de los centros propios. Esto quiere decir que la mayoría del alumnado, este año 346 familias más, habrán de hacer un gran esfuerzo para acceder a la Universidad. Mientras que es imposible calcular el número de estudiantes que se quedarán sin formación universitaria porque no puedan permitirse pagar la matrícula en un centro adscrito. Un paso más hacia el abismo de “la educación y la formación para quien pueda pagarla”.

En cuanto a estudios de Máster, este curso la Universidad de Sevilla oferta sólo 430 plazas para el MAES. Muchas menos de las 1.000 que ofertaba el curso pasado, pero también menos de los 683 finalmente matriculados el curso pasado. Sin embargo, estos estudios de máster se ofertan este curso, por primera vez, en Osuna. ¿Cómo puede explicarse esto? ¿Por qué se deriva la oferta de plazas propias de la US al “Francisco Maldonado”? Nos tememos que la respuesta esté, como siempre, en los recortes.

También nos preocupan las plantillas de los centros adscritos ¿En qué condiciones trabajan? ¿Qué formación se les exige? ¿Qué formación se les da para el desempeño de su trabajo? ¿Existe libertad de cátedra en su ejercicio docente? Libertad… resulta chocante descubrir en el ideario del “CEU Cardenal Espínola” el siguiente punto: “Formar a nuestros alumnos en la fe y en la ética de la Iglesia Católica y en la transcendencia religiosa”. ¿Debe un título de la Universidad de Sevilla estar inspirado por tal principio?

Por la integración progresiva de los centros adscritos como propios en la Universidad de Sevilla