Esta cocina está construída, al igual que las antenas parabólicas, en forma de paraboloide de revolución. La olla se sitúa exactamente en el foco del paraboloide, de forma que los rayos solares, al reflejarse en la superficie de la cocina inciden en el alimento a calentar. Este modelo de cocina solar puede alcanzar los 300 grados de temperatura. Tienen más información en MatesMates.
Como curiosidad, pueden ver en esta página distintos diseños de cocinas solares, no necesariamente parabólicos.
En la misma propiedad del foco de la parábola se basan algunas estaciones de generación de energía termosolar. Éstas disponen espejos en forma de cilindro parabólico, en cuyo foco sitúan un tubo por el que pasan unas sales que alcanzan grandes temperaturas y conservan el calor por mucho tiempo. Posteriormente usan el calor para transformar agua en vapor y generar energía eléctrica.