Recientemente hemos podido leer en ABC, y en otros periódicos, que un investigador (Gary McGuire, matemático) ha elaborado un complejo algoritmo para resolver un sudoku y asegurar que este célebre juego no tiene solución a menos que haya 17 cifras-pista de inicio.
Lo que nos llama la atención de la noticia es la siguiente frase:
McGuire ha llegado a esta conclusión tras trabajar durante dos años en el algoritmo complejo que le ha llevado a la solución. Para ello ha utilizado unos siete millones de horas buscando a través de las redes.
Siete millones de horas son 291.666 días y 16 horas, es decir, 799 años 31 días y 16 horas. Creo que a muchos nos parece más importante conocer cómo ha podido comprimir todos estos años de “búsqueda a través de las redes” en sólo 2.
Bromas aparte, pueden obtener el artículo de McGuire aquí. En la página 37 el autor explica que los cálculos informáticos (pues ha resuelto el problema probando con todos los posibles sudokus de 16 pistas) han llevado 7.1 millones de horas en una máquina Stokes que tiene 320 nodos de cómputo, cada uno de estos nodos tiene dos procesadores con seis núcleos. Es decir, que el cálculo, extraordinariamente comlejo, lo han realizado 320x3x6=3840 núcleos en paralelo. A pesar de la enorme capacidad de cálculo de la máquina Stokes, los cálculos han tardado un año en realizarse.
Entendemos que el periodista no tiene que comprender todos los detalles técnicos de la noticia, pero sí debe saber que 7 millones de horas son muchas para un ser humano.