Hizo su tesis doctoral en matemáticas puras, en una rama tan “esotérica” y especializada que incluso si alguien obtiene un gran resultado, éste sólo puede ser valorado por unas docenas de personas en el mundo. Pero él dejó ese mundo y, sin entrenamiento formal, ha entrado en otro: el mundo de la biología molecular, la medicina y la “genómica“.
Pueden ver un vídeo con la entrevista a Eric Lander y el artículo “Power in numbers” (por Gina Kolata) en The New York Times.